Los alcaldes de pequeños municipios no quieren salirse de la política de ciudad

En el Gard, el comunista Patrick Malavieille, presidente del grupo de interés público Alès-Cévennes, y los alcaldes de tres municipios están preocupados por los nuevos contratos de ciudad que entrarán en vigor el 1oh enero de 2024, y podría ser expulsado de Anduze, La Grand’Combe y Saint-Ambroix. La razón principal ? El número de personas que viven en los barrios afectados ya no alcanza el umbral de los 1.000 habitantes, excluyendo efectivamente a estos sectores de geografía prioritaria, según los criterios de la agencia nacional para la cohesión territorial.

Estos tres municipios del Gard pertenecen a la antigua cuenca minera de Alès, en un territorio económicamente devastado, donde la precariedad es omnipresente. Se benefician de la política de la ciudad a través de un contrato realizado en 2015. “Estos contratos están llegando a su fin y la nueva versión parece no querernos”dice Patrick Malavieille.

A las puertas de las Cévennes, La Grand’Combe, una ciudad de 15.000 habitantes en la década de 1970, ha visto descender su población (4.800 habitantes hoy) y Trescol, que albergaba a las familias de los mineros, se ha convertido en un barrio extremadamente empobrecido. “Hemos demolido algunas HLM para hacer huertas colectivas y los vecinos se han ido a vivir a otros lugares. Mejoramos las condiciones de vida de los ciudadanos más precarios y en algún lugar nos regresa”critica al alcalde Laurence Baldit (Partido Comunista), muy preocupado, porque Trescol solo cuenta… 957 personas.

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“La política de la ciudad es muy útil. Pudimos construir un centro de salud multidisciplinario y un parque intergeneracional que funciona muy bien. Vamos a trabajar en nuestro expediente, revisar los criterios relativos a la renta mediana de los habitantes”, tomar el funcionario electo que se basa en estos presupuestos. En 2022, el Grand’Combe ganó 300.300 euros.

retirada estatal

En Nîmes, la prefectura confirma que “estos municipios son potencialmente salientes”. Por el lado de Anduze, la alcaldesa ecologista Geneviève Blanc no quiere creerlo. “Entre los habitantes en gran precariedad, muchos no responden al censo y bajo los radares del INSEE, dijo el alcalde. No puede ser un criterio de decisión. Este contrato deberá renovarse al menos una vez más. »

En esta ciudad popular entre los veraneantes, una vez superada la principal vía turística, sus restaurantes y puestos de postales, se descubre otra realidad en el interior del centro histórico, donde la tasa de desempleo supera el 20% (22,6% en 2019). “Hemos contratado a un mediador social que acompaña a las familias en sus pasos y les ayuda mucho con la alfabetización”resume el elegido, quien también cita iniciativas económicas para la vuelta al empleo, la apertura de una boutique de diseñador y para mañana, la aparición de un tercer local, si se renueva el contrato. “Para este proyecto estamos contando con fondos europeos del 40% al 60%, que solo lo conseguiremos si estamos en un contexto político de la ciudad. »

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