“Ayudando al hospital llevando el centro de gravedad de nuestro sistema de salud al hogar”
D“De Atenas a Estocolmo, de Lisboa a Londres, el panorama internacional de los sistemas de salud es preocupante. Si damos un paso atrás, la observación es clara: las poblaciones están envejeciendo y están cada vez más desatendidas. El gasto en salud ahora está cambiando más rápido que el producto interno bruto, y las aseguradoras públicas y/o privadas en todas partes están presionando a los proveedores (profesionales de la ciudad y establecimientos de salud) para que logren ganancias de productividad y, en última instancia, ahorros para garantizar su sostenibilidad.
El crecimiento de la demanda de cuidados está asociado de facto a la búsqueda de ganancias de productividad. Esto último redunda para los cuidadores en la reducción del tiempo dedicado a la relación con el paciente, que está en el centro de su vocación profesional. Esta es la principal causa de la crisis de sentido de los profesionales de la salud en Francia y en todos los países resueltos.
Así, la Organización Mundial de la Salud sigue alertando sobre las preocupantes perspectivas de puestos de trabajo vacantes para los profesionales de la salud para 2030. Esta crisis de vocaciones antecedió a la crisis sanitaria del Covid, pero esta última se amplificó. Existe ahora una contradicción tan paradójica como preocupante entre la aceleración del progreso médico -un elemento de progreso considerable- y el deterioro de las condiciones de ejercicio de los profesionales. Por ejemplo, la innovación sanitaria permite, gracias a los tratamientos de inmunoterapia (facturados de media 400.000 euros por paciente a Medicare), transformar un cáncer que ayer todavía era muy agresivo en una enfermedad crónica.
Ante esta proeza médica y científica, los mismos hospitales de última generación que brindan estos tratamientos a toda la población están sufriendo, por ejemplo, el empobrecimiento de sus sistemas de información, que hoy van a la zaga de la revolución digital, con consecuencias para la ergonomía del trabajo profesional.
Las profesiones sanitarias, que estuvieron entre las más buscadas en nuestras sociedades a lo largo del siglo XXmi ¿Serán oficios descuidados en el siglo XXI?mi siglo ? Frente a esta trampa histórica, los líderes del sistema de salud tienen hoy la responsabilidad ética de ser, a su vez, fuente de propuestas de cara a profesionales, pacientes y autoridades públicas.
Nueva ecuación ganadora
En este cuadro internacional lamentablemente bastante homogéneo, nuestro país adolece, sin embargo, de una especificidad. Desde hace más de veinte años, la primera línea de atención ya no puede hacer frente al envejecimiento de la población y la carga creciente de enfermedades crónicas. En una generación, el hospital ha visto crecer constantemente su actividad principal, hasta el punto de asumir actividades que no deberían ser propias. Se ha convertido en el manitas del sistema de salud, lo que a su vez lleva a la comunidad a pedirle nuevas ganancias de productividad…
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